Esta organización fue creada en 2006 en Altos de Cazucá, precisamente en el barrio de Soacha, ubicado en la periferia de Bogotá, a partir de las problemáticas que vivían y viven los niños, niñas y adolescentes en esa zona. Desde sus inicios, el fútbol fue una herramienta para la inclusión social, que forjó la misión de la Fundación: activar el poder del juego para generar esperanza, autonomía y pertenencia. Actualmente, la organización desarrolla más de 20 propuestas, nucleando a más de 1500 niños, niñas y adolescentes.
En los últimos años, la organización ha incorporado una línea programática vinculada al sistema de responsabilidad penal adolescente, a partir de que algunos jóvenes con los que trabajaban fueron privados de libertad. En este sentido, se desarrolló una metodología en contextos de privación de libertad, donde los propios adolescentes lideran propuestas artísticas y culturales, acompañándolos en su egreso. A su vez, el equipo de Tiempo de Juego también ha desarrollado propuestas de atención para los/as jóvenes que han estado institucionalizados una vez que egresan.
En este proceso, se han encontrado con que muchos jóvenes tienen historias donde sus familiares están o han estado privados de libertad. Al mismo tiempo, varios de estos jóvenes privados de libertad tienen hijos e hijas pequeños/as.
La realidad que identifica Tiempo de Juego es la realidad de cientos de organizaciones en América Latina y El Caribe. Incorporar su mirada y su experiencia en esta problemática contribuirá al fortalecimiento y expansión de las acciones de nuestra Plataforma.